jueves, 21 de febrero de 2013

Curiosidades de las Biblia


  ¿Sabía usted?

¿Cuántos libros contiene la Biblia?
La Biblia contiene 66 libros escritos por 44 autores durante un período que abarcó alrededor de 1500 años, divididos entre:
      39 libros del Antiguo Testamento
           (fueron escritos entre los años 1400
             y 400 AC.) Testamento y
      27 libros del Nuevo Testamento.
           (Escritos entre el 50 y 100 DC.)

La Biblia entera dividida en capítulos y versículos apareció por primera vez en la Biblia Ginebra de 1560.

¿Cuántos capítulos contiene la Biblia?
La Biblia cuenta con 1,189 capítulos.

¿Cuántos versículos contiene la Biblia?
La Biblia posee 31,103 versículos.

¿Cuántas letras y palabras contiene la Biblia?
   La Biblia Contiene:
               3,566,480 letras
                  773,693 palabras

¿Cuál versículo está en la mitad de la Biblia?
El versículo 8, del Salmo 118.

¿Cuál es el nombre mas largo que se encuetra en la Biblia?
Se encuentra en el capítulo 8 del libro de Isaias 8:1 y es Maher-salal-hasbaz.

Versos parecidos de libros diferentes:
El capítulo 37 del libro de Isaías y el 19 de 2da de Reyes son parecidos.

Contiene casi todo el alfabeto:
En el versículo 21 del capítulo 7 de Esdras está casi todo el alfabeto.

La pieza más fina de lectura:
Es el capítulo 26 del libro de los Hechos.


¿Qué significa "testamento"?
Testamento significa "convenio" o "contrato."

¿Quién escribió la Biblia?
La Biblia fue escrita bajo la inspiración del Espíritu Santo por más de 40 autores diferentes de todos los quehaceres de la vida: pastores, granjeros, fabricantes de tiendas de acampar, médicos, pescadores, sacerdotes, filósofos y reyes. A pesar de estas diferencias en ocupaciones y la asombrosa cantidad de años que fueron necesarios para completarla, la Biblia es sumamente cohesiva y unificada en propósito y fondo.

¿Qué autor contribuyó con más libros al Antiguo Testamento?
Moisés. Él escribió los primeros cinco libros de la Biblia, llamados el Pentateuco; los que forman los cimientos de la Biblia.

¿Qué autor contribuyó con más libros para el Nuevo Testamento?
El Apóstol Pablo, quien escribió 14 libros (más de la mitad) del Nuevo Testamento.

¿Cuándo se escribió la Biblia?
Se escribió en un período de unos 1,500 años, de alrededor de 1450 a. C. (el tiempo de Moises) a aproximadamente 100 d. C. (a continuación de la muerte y resurrección de Jesucristo).

¿Cuál es el libro más antiguo del Antiguo Testamento?
Muchos estudiosos están de acuerdo en que Job es el libro más antiguo en la Biblia, escrito por un Israelita desconocido aproximadamente 1500 a. C.

¿Cuál es el libro más reciente del Antiguo Testamento?
El libro de Malaquías, escrito aproximadamente 400 a. C.

¿Cuál es el libro más antiguo del Nuevo Testamento?
Probablemente el libro de Santiago, escrito aproximadamente en 45 d. C.

¿Cuál es el libro más reciente del Nuevo Testamento?
Apocalipsis es el libro más reciente del Nuevo Testamento, escrito aproximadamente 95 d. C. por el Apóstol Juán.

¿En qué idiomas se escribió la Biblia?
La Biblia se escribió en tres idiomas: Hebreo, Arameo, y Griego.

¿Cuándo se canonizó la Biblia?
El Nuevo Testamento entero como nosotros lo conocemos hoy, se canonizó antes del año 375 d. C. El Antiguo Testamento se había canonizado previamente mucho tiempo antes del advenimiento de Cristo.

¿Qué significa "canonizar"?
"Canonizar o canon" se deriva de la palabra griega "Kanon," que significa "vara de medir". Para que un libro fuera "canonizado", el mismo tenía que pasar la norma o prueba de autoridad e inspiración divina. Estos libros se convirtieron en la colección de libros o "escrituras" aceptadas por los apóstoles y por la dirección de la iglesia primitiva como una base para la creencia cristiana.

¿Cuándo se imprimió la Biblia?
La Biblia fue impresa en 1454 d. C. por Johannes Gutenberg que inventó los tipos que luego se convirtieron en la imprenta. ¡La Biblia fue el primer libro alguna vez impreso!

Hasta ahora, ¿cuál es el manuscrito más completo y más antiguo de la Biblia en existencia?
El "Codex Vaticanus" que data de la primera mitad del Siglo IV. Se encuentra en la biblioteca del Vaticano en Roma. Sin embargo, hay fragmentos más antiguos de la Biblia que todavía se conservan--el más antiguo es un trozo diminuto del Evangelio de Juan que se encontró en Egipto, de principios del Siglo II. (Se encuentra actualmente en la Biblioteca de Rylands en Manchester, Inglaterra).

¿Cuál es el libro más extenso de la Biblia?
El libro de los Salmos y contiene 150 capítulos.

¿Cuál es el libro más corto de la Biblia?
2da de Juan. Sólo tiene un capítulo y 13 versículos.

¿Cuál es el capítulo más extenso de la Biblia?
El Salmo 119 y posee 176 versículos.

¿Cuál es el capítulo más corto en la Biblia?
El Salmo 117 y solo posee 2 versículos.

¿Cuál es el verso más extenso de la Biblia?
Ester 8:9.

¿Cuál es el verso más corto de la Biblia?
Juan 11:35.

¿Qué libro en la Biblia no menciona la palabra "Dios?"
El libro de Esther.

¿Quién era el hombre más viejo que alguna vez vivió mencionado en la Biblia?
Matusalén, quien vivió 969 años (Génesis 5:27).

¿Quiénes fueron los dos hombres en la Biblia que nunca murieron?
Enoc, quien caminó con Dios y un día Dios se lo llevó al cielo (Génesis 5:22-24). Y Elias quien fue llevado al cielo por carrosas de fuego (2 Reyes 2:11).

¿Quién dice la Biblia que era el hombre más manso (excluyendo a Jesús)?
Moisés (Números 12:3).

¿En cuántos idiomas se ha traducido la Biblia?
La Biblia Santa se ha traducido a más de 2,018 idiomas, con traducciones parciales innumerables, y traducciones de audio (para los idiomas no escritos). (Ésta es una cantidad enorme de traducciones. En comparación, Shakespeare, considerado por muchos ser el escritor más promitente del idioma inglés, se ha traducido sólo en 50 idiomas.)

¿Es la Biblia todavía el libro de mayor venta en el mundo?
Sí, y todavía lo es, ¡aleluya!

CORTESIA DE LA BIBLIA EN 3D PARA PC

lunes, 18 de febrero de 2013

Recomendaciones para el buen uso de Facebook


La Biblia es muy clara en cuanto al hecho de que todo lo que un cristiano haga, aún sea comer o beber, debe hacerlo para la gloria de Dios (1Cor. 10:31). En Col. 3:17 Pablo dice algo similar: “Y todo lo que hacéis, de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias por medio de Él a Dios el Padre”.

Es obvio que el uso del Facebook no puede estar fuera de ese principio rector de la vida cristiana. Todo lo que hacemos, de palabra o de hecho, debemos hacerlo en el nombre del Señor Jesús, es decir, dentro del marco de Su autoridad soberana y con el propósito de honrarle a Él.
Pero ¿cómo podemos usar el Facebook de tal manera que ese propósito se cumpla? Antes de responder esa pregunta de forma positiva, permítanme compartir algunas preocupaciones que tengo con respecto al uso de las redes sociales.
La primera tiene que ver con la buena mayordomía que debemos hacer del tiempo. Toda persona que tenga una cuenta de Facebook sabe lo fácil que resulta perder horas y horas en esa maraña de amigos, posteando fotos (y viendo las que cuelgan los demás); y, por supuesto, leyendo los comentarios.
Si hay alguien que debe valorar el tiempo es un cristiano. Tenemos muchas cosas importantes que hacer y no tenemos todo el tiempo del mundo para hacerlas. Por eso la Biblia nos manda a redimir el tiempo: “Por tanto, tened cuidado cómo andáis; no como insensatos, sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. Así pues, no seáis necios, sino entended cuál es la voluntad del Señor” (Ef. 5:15-17).
Perder el tiempo es una necedad que una persona sabia debe evitar a toda costa. Y, definitivamente, el uso de las redes sociales representa un enorme peligro en ese sentido si no estamos alertas.
Otro peligro del Facebook, más sutil pero igualmente dañino,  es que promueve el narcisismo. El Diccionario de la Real Academia define el narcisismo como: “Excesiva complacencia en la consideración de las propias facultades u obras”. Otra acepción es: “Hombre que cuida demasiado de su adorno y compostura, o se precia de galán y hermoso, como enamorado de sí mismo”.
Yo no estoy diciendo que todo el que hace uso del Facebook es un narcisista, pero es indudable que se trata de un instrumento que puede convertirse fácilmente en un vehículo de auto promoción.
Hasta hace relativamente poco tiempo, sólo las celebridades veían sus fotos en los medios masivos de comunicación o daban a conocer lo que pensaban. Pero con la llegada de las redes sociales cibernéticas, cualquiera puede comportarse como una celebridad, colgando cientos de fotos de todas sus actividades, convirtiéndose así en su propio paparazzi, o dando a conocer a medio mundo cómo se siente hoy.
Entiendo que el Facebook es un medio para ponerse en contacto con amigos en lugares lejanos, y que el deseo de ver una foto actual de alguien que uno aprecia es perfectamente legítimo. Pero creo también que es muy fácil traspasar la línea de lo que es legítimo y apropiado.
Otro problema del Facebook es que, si bien nos ayuda a mantener el contacto con otros, también puede fácilmente remplazar las relaciones personales por relaciones cibernéticas a distancia. Es más fácil postear un comentario debajo de una fotografía que dar de nuestro tiempo para ayudar a alguien en necesidad, o discipular a un nuevo creyente, o simplemente estar allí cuando un amigo nos necesita.
Por demás está decir que mucha de la información que se cuelga en Facebook es de carácter público y que tus fotos y comentarios pueden revelar más de lo que deseas. Alguien dijo una vez: “Yo nunca me había dado cuenta de lo mucho que se divertían mis amigos sin mí (¡y cuán a menudo lo hacen!), hasta la llegada del Facebook”. Antes de postear algo pregúntate el efecto que puede tener en otras personas, para que no causes tropiezos innecesarios.
Sin ánimo de legislar sobre otros, aquí les dejo algunos consejos prácticos en cuanto al uso del Facebook:
  1. No permitas que el uso de Facebook se interponga en tu vida devocional (tu tiempo a solas con Dios); te recomiendo que no lo abras hasta haber tenido esa cita con el Señor a través de la lectura de Su Palabra y la oración (Mt. 22:34-40).
  2. No permitas que el uso del Facebook te impida dedicarte a la lectura de buenos libros (Sant. 4:17).
  3. No permitas que el uso del Facebook sustituya tus relaciones humanas y el servicio a otros (Gal. 5:13-14). ¿Qué sentido tiene estar al tanto de lo que hacen otras personas a través del Facebook, si no tenemos siquiera la gentileza de ponerles atención a aquellas que tenemos a nuestro lado?
  4. Nunca tomes tiempo de tus responsabilidades laborales para navegar por el Facebook, a menos que tenga que ver con tu trabajo (Col. 3:22-24).
  5. Mantén a raya tu curiosidad. No debemos ceder a la tentación de querer saber en qué anda todo el mundo. Pablo se opone tajantemente a las mujeres jóvenes que “aprenden a ser ociosas, andando de casa en casa; y no solamente ociosas, sino también chismosas y entremetidas, hablando de cosas que no convienen” (1Tim. 5:13). Este principio se aplica igualmente a los hombres, independientemente de la edad.
  6. No permitas que el Facebook te alimente el consumismo. Una hermana me decía hace poco cómo algunas mujeres se ven tentadas a comprar ropa nueva, “ya que comentan que no pueden ir con el mismo vestido a una actividad porque ya ese vestido salió en Facebook”.
  7. A la hora de colgar una foto, recuerda el principio de la modestia cristiana (1Tim. 2:9-10). Cierta ropa que puede ser apropiada para usarla en la privacidad de tu hogar, no necesariamente es apropiada para que todo el mundo la vea en tu muro del Facebook.
  8. Cuando escribas un comentario, recuerda que no tienes ni idea de quiénes van a leerlo. Pregúntate cómo puede ser interpretado por personas que no conozcan el contexto en que estás haciendo ese comentario a un amigo o amiga.
  9. Si vas a colgar fotos de algún evento, como tu cumpleaños por ejemplo, pregúntate si algunos pueden sentirse mal al saber que no fue invitado a la fiesta (antes del invento de las redes sociales cibernéticas eso no era un problema).
10.Al hacer uso del Facebook, recuerda lo que Pablo dice en Ef. 5:15-16: “Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos”.

Sugel Michelen

Fuente: Ayuda Pastoral.