jueves, 15 de agosto de 2013

Tiempos peligrosos

Mateo 20:25-28 Pero Jesús los reunió a todos y les dijo: «Ustedes saben que los gobernantes de este mundo tratan a su pueblo con prepotencia y los funcionarios hacen alarde de su autoridad frente a los súbditos.

 Pero entre ustedes será diferente. El que quiera ser líder entre ustedes deberá ser sirviente,

 y el que quiera ser el primero entre ustedes deberá convertirse en esclavo.

 Pues ni aun el Hijo del Hombre vino para que le sirvan, sino para servir a otros y para dar su vida en rescate por muchos».


Que está pasando hoy en el pueblo de Dios?, hoy en día el sistema de gobierno del mundo se metió en la iglesia. Los Líderes ejercen el poder, de sus liderazgos, y los súbditos obedecen sin cuestionar. Hoy se habla de “Grandes Siervos”, pero yo creo que si eres siervo no eres grande, ese título le corresponde al Señor.
Como en el mundo, hay en el pueblo de Dios como una “farándula” del evangelio, las estrellas del evangelio, tienen grandes templos y las multitudes los siguen como los fans siguen a las estrellas de rock. Todos quieren ir donde ellos están, si viven lejos preguntan si no hay una filial de ese ministro en su país, y no falta el que pide la “cobertura” de ese ministerio para abrir una sucursal en su ciudad. La iglesia se transforma en una empresa, que vende franquicias, obteniendo ganancias financieras, donde hay un CEO, que es el líder Estrella de ese pequeño imperio humano. Hoy se los ve vestidos con las mejores marcas de ropa, en autos lujosos, y algunos hasta con guardaespaldas, saludan a las multitudes de lejos, viajan de aquí para allá, con la escusa de “extender el reino”, pero lo extienden es su empresa. Cobran por enseñar el secreto de su “éxito”, usan la Palabra de Dios para ganar dinero con la necesidad de la gente. Piden pactos u ofrendas, a cambio de obtener el favor de Dios, y despojan a la gente de su dinero que ganan con el sudor de sus frentes, pero cuando alguno de sus seguidores necesita una palabra o una oración, de su “súper líder” seguramente el no puede ir está muy ocupado, seguramente en un viaje misionero, al Caribe, nunca a África o China, entonces mandan uno de sus lacayos.
Hermanos pido perdón si alguien se siente ofendido por esta palabra, es duro lo que comento pero es lo que está pasando, entre el pueblo de Dios, hoy en día confunden la bendición de Dios con el éxito del mundo, si tienes la iglesia llena sos un líder exitoso, si prosperas y tienes la mejor casa y el mejor auto eres exitoso, si te llaman de todas partes para que prediques en sus iglesias, o si cantas, para que cantes, eres exitoso, todos buscan el reconocimiento del mundo, del medio en el cual se mueven, quieren “tener éxito”, ser reconocidos, famosos “siervos”.
Pero la palabra de Dios no enseña eso, Jesus dice que en su iglesia “no será así”, sus líderes tienen que ser siervos de todos, los más humildes en actitud, los que se mezclan entre el pueblo de Dios, que no sobresale por sus palabras ni por su apariencia, sino mas bien por sus hechos, una vida genuinamente entregada al Señor, por eso Jesus dijo: el que ama su vida la perderá, pero el que pierda su vida por causa de mi para vida eterna la conservara. Si no dejamos de codiciar las cosas del mundo, como vamos a servir a Dios?, si nos conformamos al mundo entonces somos del mundo y no hacemos la voluntad de Dios. Donde queda el deseo del Señor: “Sed Santos porque yo soy Santo”, si queremos manifestar el reino de Dios, no podemos manejarnos como el mundo, así no sorprendemos a nadie, la gente ve a la iglesia y dice” vaa mas de lo mismo”.

Vivimos tiempos peligrosos, donde muchos traicionaran a la fe, y escucharan doctrinas de demonios. Tenemos que estar atentos a las escrituras, son como una lámpara que alumbra en lugar oscuro, si caminamos a la luz de la presencia de Dios, no tropezaremos hoy como dice la Palabra de Dios, es hora de “volver a la senda antigua”.

Aldo D. Monegal